martes, 30 de septiembre de 2008

Creo en ti


Creo en ti.


Creo en ti,
Si me dices que no debo temer nada.
Creo en ti
Si me dices que aun hay esperanza,
Creo en ti
Aun que no pueda contener el frió,
Creo en ti
Aun que no se si aun hay camino.

Tengo dos piezas de alma cubiertas de hielo
Tendidas a alba
Temblando de miedo,
Mas tengo tu risa que no dice nada
Que pinta en el cielo
Estrellas doradas.
No tengo nada y te tengo a ti,
No tengo prisa y no paro de huir.

Corro entre el canto del agua azulada
Con el aire en la cara
Del soplo de mi inocencia acabada.
Siento tu brisa jugando a ser calma
Sanando la herida
De mi retórica lastimada.
Vivo en el frió aun que tú estés aquí,
Me muero en mis miedos aún que creo en ti.

Tengo 9 días, 3 horas y dos alas perdidas,
Tengo tantos miedos y duelos que me dejan sin vida,
Tengo 5 Anglés que cantan detrás de mi agonía,
13 años en lucha y 8 segundos perdida,
Tengo miedo del aire y tengo miedo de ti
Tengo miedo de amarte, tengo miedo del azul
Tengo miedo de alcanzar la estrella esa que dibujas tú.
Pero creo en ti,
Endemoniadamente
Creo en ti,
Dulce y tiernamente
Creo en ti.

Dices que todo esta bien,
Cierro los ojos sobre tu almohada
Y dejo de correr.

domingo, 28 de septiembre de 2008

Cronicas de un suspiro en el cristal




Crónicas de un suspiro en el cristal

Son las 12:09 AM, y transcurre el tiempo en medida no de segundos sino de suspiros. Caigo sobre mi cama temblando, con las rodillas lánguidas y los tobillos cansados, el aire se escapa de mi cuerpo con la prisa y la necesidad de libertad que tiene un preso que ha vivido una tortura encerrado. Pero yo no me siento libre, te recuerdo en el día como antes de que fueran las 12:09 am y fueran mas bien las 9:30pm, con el "NO" rotundo que me gritaron tus ojos, y la sonrisa perfecta que te di como respuesta, camine a las 10:00pm por aquella calle contigo, con la mirada fija y el cuerpo erguido, me aleje de ti sin un sólo suspiro. Ahora estoy en mi ventada observando la lluvia, que parece dolida, que se nota sufriendo, que le duele hasta el viento que suspira de frió y no me di cuenta hasta las 12:17 am, que la lluvia no era afuera, era sólo el reflejo de mis lagrimas en el cristal, ahora que lo sé no serán más las 12:09 y nunca serán dos años atrás.